La crisocola destaca por sus colores vibrantes y variados, que van desde el verde azulado hasta el azul verdoso, pasando por tonos turquesa y marrón. Sus tonos suelen ser irregulares y marmoleados, lo que la convierte en una piedra muy atractiva.

Simbolismo: Tradicionalmente, la crisocola se asocia con la comunicación, la creatividad y la armonía. Se cree que promueve la paciencia, la compasión y la fortaleza interior.

Propiedades: Se dice que la crisocola atrae la prosperidad, la abundancia y el éxito. También se cree que ayuda a equilibrar las emociones y a fortalecer el sistema inmunológico.